jueves, 28 de enero de 2010

Aprendiendo a vivir


No sé por qué soy tan insaciable, en un continuo querer llegar y un nunca acabar.
Por fin me he dado cuenta que lo mejor es hacer cómo cuando eramos pequeños dejándonos llevar, sin cabreos y sin los pudo heber sido y no son, simplemente amoldándonos a las circuntancias y viviendo.
Hoy entendiendo que la infancia es fácil porque no la complicamos, si hay un bache en el camino, lo rodeamos, o sencillamente saltamos sobre él jugando con el barro.
Con su propia banda sonora: Bitter sweet symphony y actitud pueril.