miércoles, 26 de agosto de 2009

Que dulsesico ha sido!

No sé cómo se sitió Cecilia Vanger cuando se enteró de todo, ni cómo serían sus sentimientos ahora, hacia Mickel. Lo que tengo muy claro y que estos días he podido comprobar, es que las estrellas siguen existiendo, que las personas únicas también y que los dulces saben más dulces que nunca, con buena compañía.
Tras afilar el hacha, retorno a envolverme en mi sweet reality, más morena y con nuevas ilusiones en el horizonte. Mientras, me voy entregando a la complicidad de los silencios.
Con su propia banda sonora: I gotta feeling y no deseando que fuera de otra forma.
Mil gracias por vuestros tiempos.